D
esde el inicio de su presentación, Overshock dejó claro su potencial en la escena metal costarricense. Para la banda, Santos Rock 2025 marcó un momento muy importante:
“Es la primera vez que tocamos frente a tantas personas realmente”, compartieron después de terminar su presentación. El ambiente del festival, de acuerdo con la banda, fue un reflejo del espíritu que define a los Santos: diversidad, apertura y energía.
“Se nota que la gente está deseando ver bandas, sin importar el género. Eso me encanta, porque uno llega a públicos que normalmente no irían a un show de uno”, comentaron, destacando cómo estos espacios permiten el descubrimiento mutuo entre artistas y oyentes.
Uno de los momentos más intensos llegó cuando interpretaron “Breathe”. Durante el breakdown, el público empezó un mosh que reafirmó la conexión única entre escenario y audiencia.
“Ver a todo el mundo apuntado al mosh… Es un back and forward que se siente muy bonito.”
Al hablarle a las nuevas generaciones, Overshock no duda: hay que lanzarse.
“Nosotros podríamos decir que también somos nueva generación… hay que mandarse sin miedo, practicar y disfrutar, porque los sueños se cumplen”.
Overshock no sólo trajo potencia al escenario, sino también un mensaje claro: la música se trata de conexión, pasión y comunidad.
Por la libertad de expresión y los derechos culturales.